No hace a la violencia; la violencia es un noticiero que pone en pantalla un tipo destripado. Lo de los gallos no tiene absolutamente nada que ver con eso. Son formas de buscar la estética, tal vez la estética de la muerte en algún aspecto. Está mostrado como ha sido mi intención: los gallos de riña conforman una especie de pintura clásica japonesa. Ver a su gallo El Cautivo pelear le desgarra el corazón a Aniceto, el gallero ama a su gallo y ama la estética del gallo, cómo se mueve. Todo lo demás, la muerte del personaje, es intentar copiar las grandes muertes de la historia teatral. Pero es eso, nada más. Cuando yo quiero mostrar algo lo muestro, no hago vericuetos.
Vayan y lean esta entrevista al más grande autor del cine argentino, que hasta cuando habla filma bellísimo.